Tener Éxito con una Receta Sencilla de un Maratoniano
Tener éxito y alcanzar lo que uno se propone está más cerca de lo que pensamos. La mayoría de nosotros somos capaces de conseguir superar retos y desafíos que, en un principio, nos parecían inalcanzables. La fuerza del ser humano por alcanzar lo que se propone es extraordinaria, sólo hay que ser consciente de las propias capacidades que uno posee y no tener miedo por mostrarlas. La brecha entre lo que creemos que podemos hacer y lo que finalmente alcanzamos es muy pequeña, por ello, cuanto más confianza tengamos en nosotros mismos mayores serán nuestros logros. Eso sí, siempre partiendo de una perspectiva realista y que tenga en cuenta nuestras limitaciones pero que evite tomar como punto de partida el "¡No puedo!". Frase que debemos evitar decirnos a nosotros mismos y obviar cuando otros nos digan que "no podemos" porque estos, por desgracia, serán mayoría.
La receta del éxito que propongo es sencilla y apenas necesita de cinco ingredientes que cualquiera de nosotros tenemos a nuestra disposición. Sólo hemos de ser capaces de utilizarlos y combinarlos de una manera equilibrada. Vamos a intentar, siguiendo esta receta, darnos a nosotros mismos la oportunidad de experimentar nuevas situaciones, emociones de las que hace tiempo no disfrutamos y empleemos habilidades que sabemos que poseemos pero que, quizá, lleven largo tiempo silenciadas.
Con estos cinco pasos podremos alcanzar lo que nos propongamos. No necesariamente tenemos que vincular el éxito al trabajo o a acumular riqueza. También puede ser que nuestro éxito sea mostrar habilidades públicamente que manteníamos reprimidas, hacer un esfuerzo consciente por superar nuestras limitaciones, perder el miedo a hablar en público, centrarnos en disfrutar más del presente, intentar mostrar afecto y amor a las personas a quienes deseamos brindárselo... Recuerda que el éxito es básicamente darnos a nosotros mismos la oportunidad de vivir algo nuevo que conlleve superar nuestras límites.
La receta del éxito que propongo es sencilla y apenas necesita de cinco ingredientes que cualquiera de nosotros tenemos a nuestra disposición. Sólo hemos de ser capaces de utilizarlos y combinarlos de una manera equilibrada. Vamos a intentar, siguiendo esta receta, darnos a nosotros mismos la oportunidad de experimentar nuevas situaciones, emociones de las que hace tiempo no disfrutamos y empleemos habilidades que sabemos que poseemos pero que, quizá, lleven largo tiempo silenciadas.
- Plantea un Objetivo: uno de los motivos fundamentales por los que nos quedamos instalados en el sedentarismo y la inacción es la ausencia de metas. Hemos de estar continuamente nuevos retos y desafíos que nos movilicen y nos lleven a la acción, ya que si tenemos una meta tendremos la sensación de que nos dirigimos a alguna parte y que nuestros pensamientos, nuestras ideas y nuestra creatividad tienen una finalidad por la que manifestarse. Pensemos en los atletas de Maratón, al terminar después de varias horas de carrera y mientras tratan de recuperarse minutos después de haber realizado un esfuerzo extenuante y de una reciente experiencia dolorosa ya se están planteando cuándo repetir la experiencia.
- Encadena Pequeños Logros: llegar a la cumbre del éxito supone recorrer un camino en el que los aciertos y los errores se irán sucediendo de manera constante. A los días buenos le sucederán otros malos, pero éstos últimos no deben convertirse en una excusa para la renuncia sino un simple recordatorio de que el camino del éxito no es un recorrido sencillo. Piensa en cómo los maratonianos se van fijando en su plan de entrenamiento pequeños logros, no se trata de lograr resultados inmediatos sino que se trata de un proceso largo. Un maratón requiere meses de entrenamiento indistintamente del nivel del atleta. En las primeras sesiones no se será capaz de recorrer los 42km al ritmo deseado, sino que será un trabajo constante en el que a días en los que las sensaciones serán excelentes le vendrán otros en los que la fatiga, el hastío y la desidia nos empujarán hacia el sofá. Es en este momento donde mostraremos si verdaderamente tenemos la voluntad de conseguir lo que queremos o si nos dejaremos llevar por la voluntad de fracasar.
- Esfuérzate: el ser humano tiene la incapacidad de disfrutar de aquello por lo que no se ha esforzado en conseguir. Piensa que las personas a quienes les toca la lotería apenas unos meses después vuelven a los niveles de felicidad o infelicidad que tenían antes de ganar el premio.Sin la entrega a un proyecto, sin la dedicación y sin la sensación de que hemos aportado algo de nosotros mismos al logro que hemos alcanzado nos estaremos privando del goce de alcanzar la meta soñada.
- Siéntete Satisfecho: el éxito hay que disfrutarlo pero ello no requiere caer en exhibiciones, alardes y ostentaciones por haberlo alcanzado. Quien verdaderamente disfrutará del logro será uno mismo, no pretendamos alcanzar una meta de cara a ostentar de su consecución ante los demás porque estaremos alcanzando una meta falsa. Nos sentiremos satisfechos siempre que hayamos dado lo mejor de nosotros mismos para ser lo mejor que podíamos llegar a ser. Piensa en que en un Maratón igual de satisfacción siente el que cruza primero la línea de meta como quien lo hace dos horas más tarde. La satisfacción y el sentimiento de bienestar se deriva del hecho de alcanzar algo que, en muchos momentos, se consideró como un imposible
- Busca el Equilibrio: si perseguimos es el éxito es para encontrar un escenario de sintonía entre ser interior y el entorno en el que vivimos nuestra vida. Su búsqueda debe estar orientada a lograr que nos ubiquemos en un estado de equilibrio en el que podamos dar rienda suelta a nuestro ser en un entorno que lo acepta, respeta y valora. Siguiendo con el ejemplo de los maratonianos de nada sirve prepararse y dedicarle horas al entrenamiento de cara a optimizar nuestro rendimiento físico y nuestra fortaleza mental si con ella descuidamos a las personas que tenemos a nuestro alrededor. Si le robamos tiempo de calidad a la convivencia a las personas con las que necesitamos encontrarnos y ellos necesitan encontrarse con nosotros.
Con estos cinco pasos podremos alcanzar lo que nos propongamos. No necesariamente tenemos que vincular el éxito al trabajo o a acumular riqueza. También puede ser que nuestro éxito sea mostrar habilidades públicamente que manteníamos reprimidas, hacer un esfuerzo consciente por superar nuestras limitaciones, perder el miedo a hablar en público, centrarnos en disfrutar más del presente, intentar mostrar afecto y amor a las personas a quienes deseamos brindárselo... Recuerda que el éxito es básicamente darnos a nosotros mismos la oportunidad de vivir algo nuevo que conlleve superar nuestras límites.
Tener Éxito con una Receta Sencilla de un Maratoniano
Reviewed by Ignacio Bellido
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12:22
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